Flipped classroom
'Flipped classroom': una metodología para transformar el aprendizaje
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El modelo pedagógico flipped classroom, también conocido como aula invertida, ha ido ganando relevancia en los últimos años ante la necesidad de cambiar el sistema tradicional de aprendizaje para adaptarlo a las nuevas generaciones. La clave de su propuesta es que el alumno prepara las lecciones (parte teórica) fuera de clase y realiza las actividades (parte práctica) en el aula.
La educación, de la mano de las nuevas tecnologías, ha cambiado mucho y muy rápido durante los últimos años, de ahí la aparición de metodologías disruptivas que buscan aunar lo mejor del mundo tradicional (analógico) y del moderno (digital). Una de ellas es la metodología flipped classroom, que propone un giro de 180º, cambiando las tornas y sacando del aula ciertas tareas para, a cambio, integrar otras más relevantes para el aprendizaje.
Qué es flipped classroom
Al igual que tantas otras innovaciones educativas, como el blended learning o la gamificación, el flipped classroom surge en Estados Unidos en 2007, cuando dos profesores, Jonathan Bergman y Aarom Sams, empezaron a grabar explicaciones en vídeo para alumnos que, por distintas causas, no podían asistir a clase. La experiencia resultó tan positiva que el sistema se fue popularizando hasta el punto de convertirse en una metodología con identidad propia.
Desde entonces, según la Flipped Learning Network, organización de referencia mundial en esta materia, este modelo se define como un enfoque pedagógico en el que "la instrucción directa se mueve desde el espacio de aprendizaje grupal al espacio de aprendizaje individual, y el espacio grupal resultante se transforma en un entorno de aprendizaje dinámico e interactivo donde el educador guía a los estudiantes a medida que aplican conceptos y se involucran creativamente en la materia".
Dicho de otro modo, mientras que el aprendizaje tradicional se basa en la máxima de que el alumno aprende en clase y practica en casa, el flipped classroom invierte los términos: el alumno estudia la teoría en casa y practica lo aprendido en clase, siempre interactuando con las TIC y trabajando de manera colaborativa. Así, el tiempo en el aula se optimiza y el profesor puede dedicarlo a afianzar conceptos, resolver dudas, trabajar en equipo y atender de forma personalizada las necesidades de cada alumno.
La metodología flipped classroom
Cada una de las iniciales de la palabra FLIP representa un pilar de la metodología flipped classroom:
- F: Flexible environment / Ambiente flexible
Los docentes crean espacios adaptables y son los alumnos quienes eligen dónde y cuándo aprenden. Esta flexibilidad afecta no solamente a los tiempos y lugares de aprendizaje, sino también a las expectativas docentes y a las evaluaciones de los estudiantes.
- L: Learning culture / Cultura de aprendizaje
El foco del aprendizaje pasa del profesor al alumno, transformando la cultura del aprendizaje. El tiempo en clase se dedica a profundizar en los temas, resolver las posibles dudas y realizar actividades de aprendizaje más enriquecedoras.
- I: Intentional content / Contenido intencional
Los educadores de flipped learning piensan y crean contenidos con una clara intencionalidad: maximizar el tiempo en el aula, buscando la fluidez en los procedimientos, para centrarse en los estudiantes y en el desarrollo de su comprensión conceptual.
- P: Professional educator / Educador profesional
El aula invertida exige docentes comprometidos que observen a sus alumnos, dándoles feedback y evaluándolos en todo momento. Su rol en el aula debe ser menos prominente y buscan conectar con homólogos para mejorar su ejercicio y compartir procedimientos.
Las ventajas del flipped classroom
La Universidad de Toronto
Enlace externo, se abre en ventana nueva. cita en un artículo dedicado a la pedagogía algunas de las ventajas del flipped classroom:
Uso eficiente del tiempo de clase
Los contenidos, en forma de videos, pueden visionarse fuera del aula. De esta forma, el aprendizaje pasivo tradicional se lleva a cabo fuera del aula y el tiempo de clase se libera para aumentar la participación y la interactuación de los estudiantes.
Preeminencia del aprendizaje activo
Cuando el componente de lectura, tradicionalmente pasivo, se saca del aula, esta adquiere el potencial de convertirse en un taller que incorpora y se enfoca en el aprendizaje activo. Así, el aula se transforma en un componente central en lugar de un complemento.
Aumento de las interacciones
El tiempo de clase liberado permite una mayor interacción entre profesores y estudiantes, y entre los propios estudiantes. También hay más tiempo para discusiones y ejercicios extendidos en el aula. Esto permite interactuar con conceptos, materiales de aprendizaje y compañeros en el aula.
Incremento de la responsabilidad
Los estudiantes deben venir preparados a clase, lo que aumenta su responsabilidad en su vida diaria y, en concreto, sobre su aprendizaje. De alguna manera, esto también facilita que el alumno dirija su propio aprendizaje.
Múltiples estilos de aprendizaje
El aula invertida apoya la diversidad en el aprendizaje de los estudiantes y les permite tiempo adicional para revisar materiales. Además, pueden reflexionar y experimentar a través de preguntas y discusiones junto a sus compañeros para resolver problemas.
Los roles en la metdología flipped classroom
Tras todo lo analizado, queda claro que la metodología flipped classroom transforma en gran medida el rol de los diferentes actores del aprendizaje. A continuación, lo repasamos en detalle:
- Profesor. Como la propia clase, el rol del profesor también se invierte. La idea es dejar de ser el dueño del conocimiento para convertirse en un facilitador del aprendizaje. Entre sus competencias como guía están detectar el potencial de los alumnos, fomentar el trabajo en equipo, monitorizar a cada alumno y, en lo que respecta a sí mismo, formarse continuamente, estar conectado con otros profesores para mejorar cada día y aceptar críticas constructivas.
- Alumno. Se convierte en el protagonista de su propio aprendizaje adquiriendo desde el primer momento un papel activo, autónomo y colaborativo. De hecho, puede elegir el tipo de material que se ajusta mejor a su forma de aprendizaje y trabajar a su propio ritmo.
- Familia. Su papel es fundamental, sobre todo en las edades más tempranas, ya que son ellas las que tendrán que integrar en casa y hacer entender a sus hijos esta nueva forma de aprendizaje. En estos casos, la comunicación docentes-familias es fundamental.
Herramientas de flipped classroom
Las TIC tienen un papel clave en el flipped classroom, ya que solo a través de ellas es posible desarrollar el modelo. Un aula invertida no surge de la noche a la mañana, es necesario planificarla al detalle y contar con los instrumentos necesarios. En este sentido, además de las conocidas herramientas de Google (Classroom, Meet, Forms, Drive, etc.) existen otras específicas para crear, organizar y difundir contenido:
- Genially. Ofrece múltiples posibilidades de creación de contenido: presentaciones, infografías o juegos didácticos. Además, permite trabajar de forma colaborativa.
- Test Teach. Se trata de una plataforma que permite organizar los contenidos educativos (vídeos, imágenes, archivos, etc.) y compartirlos con los estudiantes.
- EDpuzzle. Una aplicación que permite enriquecer vídeos de YouTube o de cualquier otra plataforma, tanto propios como de terceros, añadiendo comentarios de texto o de voz, preguntas o tests.
- Socrative. Permite a los docentes testar los conocimientos de cada estudiante y realizar informes sobre el nivel de la clase, impulsando al mismo tiempo la gamificación.
- ShowMe Interactive Whiteboard. Una herramienta para grabar tutoriales de audio sobre la imagen de una pizarra y compartirlos en línea, tanto a nivel comunidad como privado.