#deportes
Iberdrola está a la vanguardia del apoyo a los deportes femeninos a través de su iniciativa 'Mujer, Salud y Deporte'. Patrocinamos ligas, selecciones nacionales, competiciones... ¡Los deportes nos encantan!
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Hablar de Garazi Sánchez es hacerlo de una de las deportistas españolas del momento. La surfista vasca es doble campeona de España y subcampeona de Europa y tiene los Juegos de Tokio 2020 en un horizonte muy cercano. Aunque ella no se considera un referente, con sus éxitos ha conseguido que muchas chicas dejen de ver el surf como un deporte de hombres y se animen a practicarlo.
¿Frontones de cesta punta en Miami o Rhode Island? En los años 60 y 70 este deporte vasco fue uno de los más populares en los Estados Unidos.
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Iberdrola colabora en España con el Plan de Apoyo al Deporte Objetivo Paralímpico (ADOP) desde su creación, en 2005, con el objetivo de proporcionar a los deportistas paralímpicos españoles las mejores condiciones posibles para llevar a cabo su preparación y afrontar con garantía de éxito la participación en los Juegos Paralímpicos.
La pandemia de COVID-19 no solo ha modificado nuestro día a día en este annus horribilis que ha sido 2020, sino que también nos ha dejado sin el acontecimiento deportivo por antonomasia: los Juegos Olímpicos. En 2021, con un año de retraso, Tokio acogerá la cita y contará con nuevos deportes olímpicos, entre ellos el surf, la escalada deportiva, el skateboarding, el béisbol o el kárate.
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Las medidas están dirigidas a evitar desigualdades entre hombres y mujeres en el empleo. La Unión Europea calcula que cada semana, de media, las mujeres dedican 22 horas no remuneradas al cuidado de los hijos, 12 más que los hombres.
El deporte, inicialmente un campo exclusivo de los hombres, ha cambiado a lo largo de la historia gracias a los hitos conquistados por las mujeres. Algunas fueron víctimas de discriminación, pero su lucha y sus logros sentaron precedente y se convirtieron en inspiración para muchas otras. El interés por el deporte femenino ha crecido en las últimas décadas, pero aún queda mucho por hacer hasta conseguir una igualdad real.