Qué es bioética
La bioética y su papel en la protección del medio ambiente
La bioética, que promueve una serie de principios para la correcta interacción del ser humano con la vida —tanto con sus semejantes como con otros seres vivos—, ha de vincularse, ahora más que nunca, a la protección del medio ambiente. Porque solo la cohesión de los valores morales y éticos de los ciudadanos con el respeto y el cuidado del entorno garantizarán la mitigación del cambio climático y la supervivencia de las futuras generaciones.
¿Quiénes deben recibir primero una vacuna en plena pandemia? Esta cuestión médica de plena actualidad es uno de los objetos de estudio de la bioética, pero también lo son otras relacionadas con la biología, la química, la antropología, etc. A su vez, la bioética también atiende a cuestiones relacionadas con el medio ambiente, buscando una mejor relación entre el ser humano y su entorno.
Bioética: Origen, definición e importancia
El bioquímico estadounidense Van Rensselaer Potter creó el término bioética en 1970 para describir una nueva filosofía que pretendía integrar la biología, la ecología, la medicina y los valores humanos. En los años siguientes, en Estados Unidos se desarrolló una concepción que reducía la bioética al campo de la medicina. En respuesta a este reduccionismo, Potter retomó su concepción original y la amplió para definir una bioética que también abarcara la relación entre la biosfera y la población humana.
La bioética encuentra aplicación en muchas disciplinas y cuestiones humanas. Desde los debates sobre los límites de la vida, como el aborto o la eutanasia, a la maternidad subrogada, la asignación de órganos para trasplantes o el derecho a rechazar la atención médica por motivos religiosos. El campo de la bioética también alcanza a las aplicaciones de la biotecnología, incluyendo la ingeniería genética, que afecta a humanos, animales y plantas, o al impacto de la contaminación del aire, el suelo y el agua sobre los seres vivos.
Tal es su relevancia, que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) alberga desde 1993 el Comité Internacional de Bioética. Este organismo, formado por 36 expertos independientes, sigue los avances en las ciencias de la vida y sus aplicaciones para garantizar el respeto a la dignidad y la libertad humanas. Además, paulatinamente fueron surgiendo comités de bioética a nivel nacional.
Los principios de la bioética
En 1978, el Informe Belmont, creado por una comisión del Departamento de Salud, Educación y Bienestar de los Estados Unidos, estableció los principios básicos de la investigación con seres humanos. Ese mismo año, el filósofo Tom Beauchamp y el teólogo James Franklin Childress publicaron Principios de ética biomédica, una obra seminal en la que describieron los cuatro principios fundamentales de la bioética:
Principio de autonomía
Son los derechos de un individuo a la autodeterminación y el respeto a su capacidad de tomar decisiones informadas sobre asuntos personales con libertad.
Principio de beneficencia
Se refiere a las acciones que promueven el bienestar de los demás. En el contexto médico esto significa velar por los intereses de los pacientes y sus familias.
Principio de no maleficencia
Se plasma en la frase "lo primero es no hacer daño" —del latín, primum non nocere—. No dañar al paciente, lo cual forma parte del juramento hipocrático, se considera lo más importante.
Principio de justicia
Se refiere a la distribución de los recursos sanitarios escasos y a la decisión de quién recibe tratamiento, así como a la selección adecuada de las personas que participan en las investigaciones.
Bioética medioambiental
La bioética medioambiental es la parte de la filosofía medioambiental que amplía los límites tradicionales de la bioética, pasando de atender únicamente a los seres humanos a incluir los derechos del resto de seres vivos en nuestros valores éticos y morales. Así, incorpora cuestiones como qué significa el respeto a la naturaleza o si podemos utilizarla y protegerla al mismo tiempo.
Por lo tanto, la bioética medioambiental desempeña un papel muy importante en la sostenibilidad y en la mitigación del impacto de la actividad humana en el medio ambiente. Cuestiones que van desde la pérdida de biodiversidad a la deforestación, el efecto invernadero, la contaminación de los océanos o la sobreexplotación de recursos, entre otros.
VER INFOGRAFÍA: La relación del ser humano con la naturaleza [PDF]
La responsabilidad del ser humano con el medio ambiente
Ante un reto como el cambio climático, que amenaza al planeta y a las futuras generaciones, se hace más necesario que nunca que las personas, los organismos internacionales, los gobiernos nacionales y las empresas asuman la responsabilidad de proteger el medio ambiente y apostar por la sostenibilidad. Con este fin, se vienen adoptando medidas en todo el mundo:
- La Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS): un plan de acción de las Naciones Unidas (ONU) a favor de las personas y el planeta.
- Políticas y negociaciones contra el cambio climático: como el Acuerdo de París, cuyo objetivo es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y evitar el calentamiento global.
- Educación ambiental: inculcar el respeto y el cuidado de la naturaleza desde edades muy tempranas es fundamental para salvaguardar el planeta.
- Conservacionismo: la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y otras organizaciones trabajan para salvar a multitud de especies de la extinción.