Entrevista a Ignacio S. Galán

"Creceremos con el esfuerzo inversor y subirá el dividendo"

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Abril de 2018.    Tiempo de lectura: 3 minutos

Con motivo de la celebración de nuestra Junta General de Accionistas 2018 el próximo 13 de abril, el grupo Vocento —uno de los principales grupos españoles de comunicación multimedia— ha realizado una entrevista al presidente de Iberdrola para abordar las cuestiones más relevantes de la actualidad de la compañía y del sector energético.

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Ignacio S. Galán, el presidente ejecutivo de Iberdrola.
Ignacio S. Galán, el presidente ejecutivo de Iberdrola.

Junto a las claves que explican la evolución del ejercicio 2017, Ignacio Galán ha destacado en la entrevista que los resultados conseguidos permiten aumentar el dividendo a los accionistas en un 4,2% y situarlo en 0,323 euros por acción. Además de las principales cifras económico-financieras, el presidente ha querido resaltar las magnitudes que reflejan el compromiso de Iberdrola con el dividendo social: la generación de empleo y riqueza en todos los territorios en los que desarrollamos nuestra actividad y la creación de valor para todos nuestros grupos de interés y para la sociedad en su conjunto.

En cuanto a las perspectivas de la compañía, el presidente ha destacado el fuerte programa de inversiones por valor de 32.000 millones de euros que el grupo va a desarrollar en los próximos cinco años, centrado principalmente en los negocios de redes y energías renovables. Estas inversiones, que suponen un incremento del 65% frente a las realizadas en el quinquenio anterior, van a impulsar el crecimiento de los resultados hasta los 3.500-3.700 millones de euros en 2022 y permitirán elevar el dividendo hasta los 0,4 euros por acción.

Junto a otros asuntos de interés informativo, el presidente ha abordado los principales retos de la política energética española, que comparte muchos de los desafíos a los que tiene que hacer frente el sector a escala global: la electrificación de la economía para avanzar hacia la descarbonización y cumplir los objetivos climáticos, la sustitución de las centrales más emisoras por fuentes limpias, la reforma de la fiscalidad energética o la necesidad de eliminar de la factura eléctrica las partidas ajenas al coste de la energía, que afecta también a otros países europeos.

¿Qué balance de 2017 presenta a los accionistas de Iberdrola?

Se ha vuelto a poner de relieve la fortaleza de nuestro modelo de negocio y su capacidad para proporcionar resultados sostenibles en condiciones adversas, como las derivadas de la fuerte caída de la producción hidroeléctrica en España y del negocio minorista en el Reino Unido. Nuestras inversiones brutas en el ejercicio aumentaron un 32% hasta alcanzar casi los 6.600 millones y logramos un crecimiento del beneficio del 3,7%, con lo que podemos incrementar también nuestro dividendo un 4,2% hasta los 0,323 euros. Pero me gustaría resaltar otras magnitudes que a veces pasan desapercibidas y que para nosotros son absolutamente centrales, pues reflejan nuestro compromiso con lo que llamamos el dividendo social. Por citar solo algunas cifras, el año pasado realizamos 4.111 nuevas contrataciones, efectuamos compras a miles de proveedores por cerca de 8.700 millones de euros y los tributos que ingresamos en las arcas públicas se elevaron hasta los 7.111 millones de euros, a los que hay que sumar, de acuerdo con estudios de los que disponemos, otros 7.000 millones de euros de impacto fiscal indirecto e inducido. Todo ello junto a una apuesta decidida por la formación y capacitación profesional de los jóvenes, el apoyo a la igualdad de género —plasmado, entre otras iniciativas, en el impulso al deporte femenino—, la protección del medio ambiente y conservación de la biodiversidad, la promoción del arte y la cultura o la cooperación y solidaridad con los más desfavorecidos.

¿Es factible la promesa de elevar el dividendo hasta 0,4 euros por acción en cinco años?

En los próximos años, Iberdrola va a realizar un enorme esfuerzo inversor en todos los países en los que estamos presentes. Nuestras inversiones hasta 2022 alcanzarán los 32.000 millones de euros, la mayor parte destinadas a redes y renovables, lo que supone un incremento del 65% frente a las inversiones del quinquenio anterior. En España, por ejemplo, vamos a invertir cerca de 1.000 millones de euros al año, el doble de lo que invertimos hace solo cinco años. Ello va a impulsar el crecimiento de los resultados hasta situarlos entre los 3.500-3.700 millones en 2022, alrededor de un 30% más que en 2017. Dado que nuestro dividendo crecerá en línea con el beneficio, podremos elevarlo hasta alcanzar esos 0,4 euros por acción.

¿Cuáles serán los países y los negocios que más contribución aportarán al grupo hasta 2022?

Nuestras previsiones apuntan a que el beneficio bruto de explotación del grupo Iberdrola se situará entre los 11.500 y los 12.000 millones de euros en 2022, de los que el 50% procederá del negocio de redes y el 27% del negocio de renovables, con una cesta de divisas muy equilibrada: un 35% provendrá de la zona euro, un 29% corresponderá al dólar, un 20% a la libra y un 16% al real brasileño, en línea con la asignación de nuestras inversiones.

 Perfil del presidente