Diferencia entre alta, media y baja tensión
Alta, media y baja tensión: ¿sabes cuál es la diferencia?
La electricidad fluye a través de un complejo circuito en el que resulta esencial la tensión eléctrica. Cuando se habla de este recorrido, a menudo se mencionan conceptos como alta tensión, media tensión o baja tensión, con características y aplicaciones diferentes. Descubre sus diferentes peculiaridades y usos.
Pulsar un interruptor para encender la luz. Calentar la cafetera. Encender el ordenador. Son gestos cotidianos y sencillos que repetimos cada día. Pero para que esta rutina se cumpla hace falta desarrollar y mantener un complejo proceso que empieza con la generación eléctrica en una central y termina con la distribución de electricidad en el hogar.
En todo este viaje que hace la energía eléctrica a través de redes e instalaciones, el concepto de tensión eléctrica es especialmente relevante. Aprende qué es, para qué sirve y sus diferentes tipos.
¿Qué es la tensión eléctrica?
La tensión eléctrica o diferencia de potencial es una magnitud física que cuantifica la diferencia de potencial eléctrico entre dos puntos. También se puede definir como la presión de una fuente de energía en un circuito eléctrico que empuja los electrones cargados (la corriente) a través de un bucle conductor. Esto permite, entre otras cosas, generar luz. La electricidad pasa de un cuerpo a otro con el voltaje.
Por ejemplo, si dos puntos (A y B) que tienen diferencia de potencial se unen a través de un conductor, se produce un flujo de electrones. El punto de mayor potencial (A) cede parte de su carga al de menor potencial (B) mediante el conductor hasta que ambos igualan su potencial eléctrico. Este “transporte” de cargas es lo que se conoce como corriente eléctrica.
La tensión se expresa habitualmente con unidades como el kilovoltio, que equivale a mil voltios (su símbolo es kV). Así, por ejemplo, una pila convencional tiene 1,5 voltios, mientras que una línea eléctrica suma miles de voltios y un rayo, millones.
La capacidad de poder variar fácilmente el voltaje sustenta el funcionamiento del sistema eléctrico. Es lo que se conoce como corriente alterna, una invención histórica del ingeniero Nikola Tesla que permite que la electricidad generada en las centrales sea elevada a una alta tensión y transportada a lo largo de enormes distancias con muy escasas pérdidas de energía. En el destino, es fácil y barato usar transformadores para distribuirla en media y baja tensión. Este avance permitió la llegada de la tercera revolución industrial.
La solución para pequeñas comunidades
Las microrredes son capaces de suministrar electricidad a comunidades específicas.
La energía eléctrica y su importancia
Es versátil, eficiente y tiene bajo impacto ambiental con fuentes renovables.
El futuro de la eficiencia energética
El Internet de la Energía tiene como objetivo automatizar y regular procesos.
Tipos de tensión
Los tipos de tensión eléctrica hacen referencia a los tipos de circuitos eléctricos que circulan por una línea eléctrica. Es decir, el voltaje depende del tipo de red. Podemos decir que una red de tensión con 30 kV es capaz de transportar la electricidad a lo largo de 30 km, aunque no es una norma general sino, más bien, una idea aproximada.
Estas son las diferencias entre la alta, media y baja tensión y sus diferentes redes y voltajes eléctricos:
Alta tensión eléctrica: para el transporte
Las líneas de alta tensión son aquellas superiores a 36 kV (es decir, 36.000 voltios), según la Norma internacional de la Comisión Electrotécnica Internacional. Dentro de esta categoría existen dos subtipos: la primera de alta tensión con una potencia superior a 66 kV e igual o inferior a 220 kV, y la segunda, superior a 36 kV e igual o inferior a 66 kV.
Las instalaciones eléctricas de alta tensión se emplean para transportar electricidad a grandes distancias, desde los centros de generación (instalaciones eólicas, hidroeléctricas, solares, etc.) hasta las subestaciones de transformación.
Este tipo de tensión permite transportar la electricidad sin riesgo de que los cables conductores se sobrecalienten o de que se influya en los fenómenos electromagnéticos. Además, por seguridad, todas las torres o cableados se despliegan bajo tierra y se colocan fuera de los núcleos urbanos para evitar accidentes.
Media tensión eléctrica: para la distribución
Las líneas de media tensión son las redes que tienen un voltaje de entre 1 y 35 kV (1.000 y 35.000 voltios), según la Norma internacional de la Comisión Electrotécnica Internacional. Se obtiene en las subestaciones eléctricas, donde la electricidad es transformada de alta tensión a media tensión.
Las instalaciones eléctricas de media tensión permiten transportar la electricidad desde las subestaciones hasta las centrales transformadoras, que suministran energía a localidades. También se emplea para abastecer a grandes consumidores de electricidad como industrias, aeropuertos o, incluso, hospitales.
Este tipo de líneas pueden ser aéreas o subterráneas y, por razones de seguridad, deben cumplir una serie de requisitos.
Baja tensión eléctrica: para el consumo
Para poder consumir electricidad en nuestros hogares, necesitamos las líneas de baja tensión, que es la que usan la mayoría de los aparatos eléctricos. Esta tensión no es igual en todo el mundo: mientras que en Europa ronda los 230 V, en la mayor parte de América varía en una horquilla de 100 y 127 V, por ejemplo.
En las centrales transformadoras se pasa la media tensión a baja tensión. Normalmente, estas instalaciones están situadas cerca de los puntos de consumo y de ahí se distribuye a todas las viviendas, comercios, empresas o lugares que lo requieran.
Las líneas de baja tensión se utilizan en la mayoría de aparatos eléctricos, ya que resulta menos peligrosa y, además, dispone de instalaciones protegidas por interruptores y diferenciales colocados en los puntos de consumo.